Dejaré que mi piel se transforme en pétalos que acarician, mientras sus labios poseen los míos, esta noche seré de ella,
hoy es la noche en que la pasión se pierde, en los minutos, en las horas, y en cada espacio de un beso,
Volaré en el principio del romance, y nadaré en salvajes olas, poseyéndola, en suave vaivén de un te quiero, de un infinito deseo,
he conocido la pasión, he vivido la lujuria, pero también, he aprendido que su voz con ternura,, me matan con un te quiero,
no hay momento más sublime, ni instante más hermoso, que el principio del amor, en 2 cuerpos que se funden,
podría dibujar el cielo con mis manos, acariciando su cuerpo desnudo, esculpiendo con mis labios su línea, mientras dulces sonidos emergen,
la luna en nuestro cuerpo, testigo de nuestra lujuria, las gotas de sudor como rocío, y el embate de mi cuerpo en el suyo como las olas,
hoy le declaro a ella la guerra, para morir en su cuerpo, cual soldado en dura batalla, entregando su cuerpo y alma al enemigo,
se escuchan explosiones de pasión y lujuria, es el éxtasis del triunfo de ella, sobre mi total derrota, me rindo, soy eternamente suyo,
Fin – vivo y muero en la historia de un Deseo...
Alan Ponce