El Arroyo de Alan Ponce
"Espero curarme de ti en unos días. Debo dejar de fumarte, de beberte, de pensarte. Es posible. Siguiendo las prescripciones de la moral en turno. Me receto tiempo, abstinencia, soledad."
-Jaime Sabines
miércoles, 17 de diciembre de 2008
Seguir Caminando,,,
sábado, 13 de diciembre de 2008
Adios
lunes, 8 de diciembre de 2008
rompiendo almas
cómo voy a odiarte...
Guardas lo que queda lentamente
nos miramos frente a frente
fijamente y sin hablar
Hago las preguntas de rutina
otro amor que se avecina
y el nuestro por terminar
Pregunto sí fui yo, si la distancia
sí son los tiempos que cambian
y sí pude ser mejor
Me dices que no existen los culpables
y que nunca vaya a odiarte por favor
Cómo voy a odiarte mujer
ni te atrevas a decirlo
sí tú me enseñaste a poder
un amor en mi destino
Sí tú me enseñaste a querer
como viejo como un niño
cómo voy a odiarte mujer
eso no lo puedo hacer
No sé que ha pasado exactamente
solo se que de repente
todo comenzó a fallar
No hago mucho más por detenerte
hace tiempo que se siente
que no te puedo parar
Pregunto sí fui yo sí la distancia
sí son los tiempos que cambian
y sí pude ser mejor
Me dices que no existen los culpables
y que nunca vaya a odiarte por favor
y cómo voy a odiarte mujer
ni te atrevas a decirlo
sí tú me enseñaste a poder
del amor en mi destino
Sí tú me enseñaste a querer
como un viejo como un niño
cómo voy a odiarte mujer
eso no lo puedo hacer
y cómo voy a odiarte mujer
sí eres todo lo que tengo
sí ya no te puedo perder
por que vives aquí dentro
cómo se te ocurre creer
que voy a dejar de amarte
cómo voy a odiarte mujer
eso no lo puedo hacer
(còmo voy a odiarte
cómo voy a odiarte)
no puedo odiarte mujer
no lo puedo hacer…
lunes, 20 de octubre de 2008
dile al viento...
viernes, 3 de octubre de 2008
ADRIANA DAMMIEL MORA - escritora
ADRIANA DAMMIEL MORA, 3 DE ABRIL DE 1975, GUADALAJARA JALISCO
MÉXICO. ESCRITORA, HA COLABORADO CON CUENTO, ENSAYO, RELATOS Y POESIAS EN
REVISTAS Y PERIODICOS CULTURALES DE GUADALAJARA Y MONTERREY, COMO EL DESVÁN, LA GACETA NOCTURNA, EL DIABLITO, URBAN PLUS Y ROLA GAY.http://www.lacoctelera.com/dammiel-mora/post/2008/08/28/todo-vuelve-la-normalidad
"Oblivion: espejo de los tiempos perdidos, eco de carcajadas y frustraciones,
saudades reprimidas latentes, cuerpo mío, amor del alma, pasión de todos los
tiempos y todas las vidas...¿podrías ahora exigir tu lugar en mi vida?..tú lo
abandonaste...¿recuerdas?...tú lo dejaste vacío...sigue mi camino de palabras,
ahí de seguro me encuentras...te escondes misterioso detrás de mucho de lo
escrito...he vivido contigo y sin tí durante años...adivinando en la distancia
tu perfume...haciendo recuento minucioso de imagenes y recuerdos, acariciando el
vacío...besando soledades ancianas...Oblivion, tan mío como ajeno, tesoro
perdido en los años...yo permanezco congelada, congelada permanecen mis pasiones
por tí...y guardo tu voz de oro bendito, profundamente en la memoria..."
sábado, 16 de agosto de 2008
No sé
mi ausencia, tu ausencia, la nuestra
cuando en desesperado impulso
solo aciertas a atrapar un recuerdo.
No sé si puedes dilatar el sentimiento
estirarlo, cortarlo, abrazarlo,
no sé como hacerlo sin ayuda,
de repente no me siento igual en tus brazos.
La indiferencia se presenta poco a poco,
no duele, no se siente,
los sonidos de la música no son los mismos,
se sienten opacos, se ven grises.
No sé, quizas estamos en el umbral de un final,
ojala sea bello como el primer encuentro,
como el primer detalle, como el primer beso,
Las luces del día mueren lentamente,
señal que la oscuridad nos cubre,
la noche inicia su danza,
baila eroticamente en ritmico aquelarre.
Para algunos inicia el coito estimulante,
para otros es la muerte de eros,
¿y para nosotros?
no sé,, simplemente no lo sé
Alan Ponce
lunes, 30 de junio de 2008
Un día
Juana barre la calle, en la mañana desde temprano,,
quiero caminar por esa banqueta y recordar a sabines
cuando en 2 prosas lanzaba un recuerdo de sus tiempos,,
quiero recordar un neruda, que en el exilio miraba el cielo
y suspìraba por regresar algun día a su pueblo,,,,
Juana barre la calle, en la mañana desde temprano,,
y dile a Quiroga y Allende,, que sus ideas no fueron vanas,,
que siguen vigentes,, y que todo un continente les recuerda,,
martires,, masacrados,, torturados,, no importa,, total estan muertos,,
Juana barre la calle, en la mañana desde temprano,,,
y dile a Rosario,, que sus recuerdos siguen vivos,,
que el balum canán de sus letras,, son hartamente reconocidos,,
que los indios siguen en lucha,,, contra ellos mismos,,,
que las tierras donde el balam rugía, hoy no existe, solo es tristeza,
Juana barre la calle, en la mañana desde temprano,,,
y deja que el viento te acaricie el rostro,,
que los olores de la tortilla,, el suelo mojado,, y el humo de las casas,,
te acompañen mientras barres,,, eso por supuesto lo disfrutas,,
te hace sentir viva,,, un día,,,
Alan Ponce
Amarte
Sin verte
He tocado suavemente el sentimiento,
rodando en tu cuerpo mis horas,
volando en tu espacio y tus labios,
tirándome al borde de tus lineas,
he caído en el abismo de tus ojos,
me he perdido en tus montañas,
me aventuro en tu selva,
y loco también me he perdido en ella.
si,, así es estoy soñando,
es la magia de ti,
te siento,, te hago el amor,,
sin verte,
Alan Ponce
miércoles, 9 de abril de 2008
Sin ti
de no escucharte por las tardes o las noches
cuando al hablarme la ternura en tu voz aparecía,
y dibujaba en el aire el amor de una madre,
Me niego a caminar sin saberte viva,
que hacía mis dias mas seguros,
que no había problemas ni obstaculos imposibles,
la tristeza simplemente no existía,
Comprendo los ciclos de la vida,
comprendo los designios de un dios justo,
pero no comprendo el dolor que lacera,
y mucho menos el aceptar que ya no vives,
Los recuerdos todos se me agolpan
desde mi niñez hasta la adolescencia
cuando mi rebeldía te marcaba
y eran tus palabras mas dulces y adecuadas,
Me formaste a tu semejanza
luchaste por hacerme mejor cada día,
tu esfuerzo dió grandes frutos,
frutos que te llenaron de besos y alegría,
Hoy me siento solo por la vida
aun sabiendo que me acompañas
me hace falta tu voz, tus caricias
tu impulso por la vida, que me dirigía,
Si he llorado, y mucho
me haces falta madre, mucha falta,
pero he de recordar tus palabras,
"el dolor no te debilita, te hace fuerte",
Mi unico consuelo, es que supe amarte,
en la totalidad de mi vida,
me llenaste de ejemplos y de metas,
que agradecí en cada beso en tu mejilla,
Gracias Madre, muchas gracias,
por haberme elegido desde el cielo,
por haber sido tu hijo,
malo o bueno, para ti fuí perfecto,
Hoy sin ti, solo digo, te confieso,
y con lagrimas en los ojos, te expreso
vives en mi y en mis recuerdos.
Alan Ponce
viernes, 29 de febrero de 2008
Por qué la poesía
inaccesible y velado,
y nosotros, el yo,
desesperado, amenazado de muerte.
Gottfried Benn,
Somos los vivos-muertos incesantes, un día morderemos el vacío, nuestra boca masticara el abismo, el agujero del gran donuts cósmico sobre el que nuestras mandíbulas se abisman.
Somos los representantes de la estirpe del acatamiento. Vivir es un puro acto de acatar. No acatar va contra la existencia. Acatamos la vida y la muerte, el cuerpo que nos ha sido dado, la mente, nuestras carencias, sólo nos queda un zulo en el que alguien ha escrito soy libre.
Mientras devoramos los instantes o somos devorados por ellos algo hay que hacer, no sólo la ingesta de tierra como lombrices. La idea es infantil, abrir la cabeza para ver qué hay. Buscad en mí, os lo ruego, soy una exhibicionista, mi vanidad no tiene límites, he nacido ser humano. Compartiré mi universo craneal con todos los que quieran acercarse, si hay algo de sabiduría es consecuencia únicamente de mi indiscutible ignorancia y de la rabia que me provoca este estado innoble. Todos somos autodidactas de nosotros mismos, lo que no sabemos es un logro, la sabiduría de poder acotar, medir, cuantificar lo que ignoramos. La ignorancia es una ciencia que experimentamos en carne propia a cada instante. El hombre halla lo que no sabe, en esto es sabio. Nuestra sabiduría siempre será tantear los límites del enigma, acotar la incógnita. En definitiva siempre seremos tantalizados por la sabiduría.
I
Todos somos unos poetas malísimos, por eso fracasamos. El auténtico animal poético devastaría esta idiotez de sociedad. Pero el autentico animal poético no es de este mundo, vive en unos acantilados tras el enigma; ¡el enigma, que grandilocuencia! no es más que nuestra propia incapacidad, lo dijo Wittgenstein: “no hay enigma”. Hacemos lo que podemos con la palabra para alcanzar lo sublime, pero la palabra es otra más de nuestras carencias. Estamos sepultados en nuestras carencias, como dijo Nietzsche “Creemos saber algo de las cosas mismas cuando hablamos de árboles, colores, nieve y flores y no poseemos, sin embargo, más que metáforas de las cosas que no corresponden en absoluto a las esencias primitivas”. Tenemos que convertir la palabra en algo que la supere. Será la palabra convertida en arte; la palabra poética. Traspasar el límite con-de la palabra es complicado, ¡y quien puede cuantificar medir analizar ese hecho? Es como humo que se deshace.
La poesía esta sobre dos pilares, la soledad y la conciencia. Para estar solos necesitamos al otro. Al otro inalcanzable. El solipsista se basta a si mismo porque todo lo abarca pero el solipsista intuye o imagina la posibilidad del otro y de esta manera funda e inventa su propia soledad. La soledad es indispensable para el hombre. Somos seres humanos en la carencia, a nada podemos compararnos a nada que no seamos nosotros mismos, no hay modelos de hombre, como dijo Sartre “el hombre, sin ningún apoyo ni socorro, está condenado a cada instante a inventar al hombre”. Las leyes naturales se transforman si es que todo se transforma como dice la sabiduría del I Chin ¿Cómo deberíamos ser entonces? No hay jueces. ¿Cómo deberíamos ser sin jueces?
La poesía no juzga, la poesía no es verdad ni mentira, la poesía es la culminación de estar siendo, la poesía verifica otra dimensión de la conciencia, es pues un camino contra la adversidad.
Tiene que ver la poesía con la sabiduría, con la belleza, con el descubrimiento, con el desbordamiento, con la fuerza… pero al mismo tiempo se deshace; la poesía no puede verificarse porque el poema no es la poesía, es lo que trasciende del poema lo que es el poema, estar siempre a punto de algo inalcanzable.
Hemos sido dados a lo real como en un sacrificio genocida, nos han entregado a lo real, (por qué, quién no nos hartamos de preguntar) con los ojos vendados, con las manos atadas a la tierra. Hemos de permanecer escupiendo poemas o cada uno lo que pueda o sepa o nada, para participar en la realización de la pirámide de la que habló Kandinsky: “Todo el que ahonde en los tesoros escondidos de su arte, es un envidiable colaborador en la construcción de la pirámide espiritual que un día llegará hasta el cielo”. Nos domina un instinto de expansión, un impulso vital que va más allá del individuo. La existencia huye, quizá vertebrándose en la huída. Vivimos en el rastro que deja la existencia, vivimos en la cultura, sobre los estratos culturales de nuestros ancestros. .¡Por qué la existencia no puede quedarse en cada uno de nosotros, por qué siempre tiene que huir ¿Por que huye la existencia?.
Hay que aprender a vivir en lo real sin temer continuamente a todo. Hay frutos en lo real pero no todos sabremos abrir la dura cáscara. Hay que hallar. La poesía es un buen instrumento para inmiscuirse en lo real, la palabra poética es una cuña con la que golpear lo real.
Veo en las palabras un poder metafísico, mas allá del significado, la poesía supera el significado de las palabras y nos brinda un sentido trascendente del lenguaje, el sentido oculto del lenguaje. “Ni el cielo ni a tierra muestran benevolencia; tratan a las cosas del mundo como si fueran perros de paja”, dice el Tao te King. No, no es benévola la naturaleza, nos crea para el sacrificio, nos usa para sus fines, más la poesía sí es benévola con el hombre, no es egoísta, no es utilitaria, no nos engaña.
La naturaleza es nuestra adversidad: vosotros sois, nos dice la naturaleza, más esto no es de vuestra incumbencia.
La poesía se rebela contra esta máxima.
jueves, 7 de febrero de 2008
silbando entre molinos
Me recuerda una nota en franco estrafalario,
un mensaje sin retoques de ciencia ni teatro,
una simple historia sin príncipes ni mendigos,
sin amores correspondidos ni olvidos atendidos.
Es simplemente el intervalo del tiempo y el espacio,
de un silbido lanzado al viento sin mayores conjeturas,
atrapado en el hueco de una hora, convertido en segundo,
que rompe el silencio de aquella llanura.
¿quien es el autor de tan genial destello producto de un aire?
eso es lo de menos, el autor solo va colocando sonidos,
coloreando a la vida en transmutantes imagenes de viento,
no le importa la vida, es un hombre feliz,
simplemente va, silbando entre molinos.
Alan Ponce
jueves, 31 de enero de 2008
Poesía: ser, existencia y locura
Voy a tomar tres rasgos distintivos de la poesía que, entiendo, la definen por sí solos: su comunión con el ser, la genuina simbiosis con la existencia y su cercanía absoluta con la locura (entre comillas). Y lo considero así desde el acto creador (y el creador), la creación y el que espera detrás, en el encuentro, en el acto gratuito que significa todo poema. El proceso lírico es un don, un privilegio (porque -como dice Páscoli- "poeta es aquel que expresa la palabra que todos tenían a flor de labios, pero que ninguno había sabido expresar"), del cual goza el poeta, mundo íntimo que compromete todos los espacios del ser; es también en cuanto creación, un hecho individual, manifestación de un ser humano ubicado en un contexto histórico y en una sociedad. Pero lo que el poeta ve más allá de esa "cáscara", que en cierto modo lo determina, está fuera de los límites geográficos o históricos, porque el creador se ocupa de aquello que pertenece al orden de lo universal; la categoría de lo universal es premisa básica de la poesía. He aquí la primera relación con el ser. De la experiencia particular del poeta, se llega a lo universal. El poeta le afirma al material cuidadosamente moldeado, la intención de ser un resonante para todos los hombres, de todas las épocas, más lejos del aquí y el ahora circunstancial, como inmerso en el Tiempo, en eterno presente que se reactualiza y vigoriza con cada nueva recepción. La poesía se remite al reino de las esencias y ese reino no conoce ni tiempo ni espacio; es verdad del ser, óntica verdad que no sabe de fronteras. Todo hecho poético representa un acontecer estético y específicamente ético. El poeta escucha las voces del ser y las transfigura a través del lenguaje; más que ello: muestra el estado de transfiguración de la naturaleza; da a las palabras una virtud muy allegada a la magia. Él se halla situado en el fondo que lleva de la sensibilidad a la sensibilidad. Si la poesía conduce a una zona sagrada, un todo que tiene de por sí un poder de magia y encantamiento (Octavio Paz dice que "la poesía es la memoria del pueblo y la gran creadora de fantasmas"), su lenguaje es asimismo totalitario, es decir, abarcador, y se otorga una razón absoluta. La palabra poética adquiere su propia identidad gracias a una voluntad creadora que le arrima su cabal espacio semántico y su valiosa intensidad. El poema no "habla" sobre el mundo, no "dice", sino que se equipara al mundo porque expresa "su hacerse constante", revelación de la existencia en movimiento. El poeta, en su libertad, convoca a las palabras, las transforma en la viva percepción de imágenes, de sugerencias, de zonas vedadas. Allí se da entonces la verdadera mutación, que siempre es distinta, es otra, del material que aporta la realidad humana; material que es captado, experimentado, hecho poesía, según la particular, sola manera del poeta.
El poeta concibe un universo, su actividad lúdica semeja el juego del niño (interpretar el sentido); su núcleo de significaciones se corresponde a un lenguaje de símbolos que necesitan ser desentrañados, y sus ojos están muy abiertos, son conocedores de la intimidad del mundo: el creador ve la vida en toda su amplitud porque desconoce la visión estrecha. El alcance ontológico del poeta es penetración inmediata, intuitiva y emocionalmente elaborada, que responde a una búsqueda permanente del fundamento último. El acto creador se presenta en la esfera del arte, en forma de trance, de compromiso (palabras que también se aplican a otros momentos críticos en la vida del hombre: la muerte o el amor), en relación con la urdimbre o textura primigenia (magia, mito, utopía, éxtasis, locura); significa un descenso a los abismos, al nudo conceptual que es origen y desarrollo, génesis virtual que solamente se expresa a partir de la palabra - grito, eco de un énfasis subyacente. Hablo de la intensidad y si reúno totalización, intensidad y pathos, me acerco a los límites, aquellos que utiliza el hombre común para establecer y diferenciar campos: transgresión ¿locura?
Dije ya que la mirada del poeta es intensa, profunda, especial, que compromete su existencia entera, es de hecho, una forma de vida, porque la intensidad consiente lazos con la transgresión y con el concepto de libertad; a su vez, si en el orden estructural la función poética tolera, exige, la transgresión sistemática de las reglas, ilógico es que quien las asuma sea una transgresor. Resulta claro que la palabra es el comienzo de la condición humana, que apunta a la vida y a su permanencia. La poesía, en tanto es manifestación honda del ser y se vale de la palabra, recibe de ella sus connotaciones, y representa una forma del éxtasis por el estado de tensión y de conmoción que implica, una suelta de fuerzas (de diferentes grados de potencia), que nacen y se prolongan en ambos polos del poetizar; es una salida del Yo (de los límites del Yo), una urgencia expresiva, y producto en consecuencia de una goce cognitivo, existencial, en este sentido: una catarsis y una especie de superación. Insisto en la pregunta: ¿es locura? Yo creo más en una transgresión: salirse de fronteras en ejercicio de una libertad, independiente de cualquier reducción que encierre prejuicios, normas, superficialidad; se estrechan de tal manera los vínculos entre los términos: vocación y transgresión.
Cierro mis palabras con un fragmento extraído de El sueño de una noche de verano (Shakespeare): "Los cerebros de amantes y de locos arden siempre, y son sus fantasías tan creadoras que ven lo que no entiende el sano juicio. Lunáticos, amantes y poetas, de su imaginación tan sólo viven".
II
No es decente acariciar
con precisión
el frío perfil de las estatuas.
No es decente tener
entre los dedos
el llanto impersonal
de su hermosura.En verdad
es necesario guardarlos allí:
donde duerme
con custodia
el horizonte.
Esbozando quizás
la más tímida condena.
domingo, 27 de enero de 2008
Poeta
El que camina por los momentos de gozo que le están asignados.
Vive los sentidos físicos uno a uno y a la vez.
Es parte del universo, quizás se siente insignificante.
Sintetiza sensaciones propias, las escribe, y un lector se identifica.
Inventa sensaciones, las escribe, y un lector se identifica.
Se automedica. (escribir es más barato que un psiquiatra).
anónimo
http://www.ysi.es/per/jrg/poeta.html
Poeta
¿Qué es un poeta?, la pregunta rompió el silencio de mis sueños,
he caminado de la mano de mis sentimientos, dibujandolos,
expresando mis vivencias, acontecimientos de tristeza y gozo,
viendo al mundo en un espejo, navegando sobre mis letras.
No sé si alcanzo ese grado de honor de señalarme como poeta,
no sé ni me interesa, solo escribo lo que vivo lo que siento,
lo que mi pobre o amplio talento pueda expresar en finas prosas,
en rudas rimas, describiendo exquisitas cosas,
Alan Ponce
lunes, 21 de enero de 2008
El Arroyo de Ponce
He viajado miles de senderos durante un año,
mis pasos han descubierto felicidad, traición y cariño,
singulares variables, algunas opuestas y otra coincidentes,
he conocido el amor, el odio, el rencor y la felicidad completa,
he visto la ternura pero también la crueldad,
me he topado con la honestidad y también con la falsedad,
he sentido el beso apasionado pero también la tristeza,
he viajado en el tiempo y el espacio,
mi recorrido ha sido hermoso muchas veces,
pero también he conocido el abandono,
en un año de vida, he recorrido todo un camino,
me he entregado en cuerpo y alma a mi cauce,
y he descubierto de que vivo y existo,
he dibujado un universo de sentimientos,
recreando mis emociones y vivencias,
simplemente he nacido en miles de corazones,
mis letras viajan a mil lugares,
miles de personas me han leído,
y han dispuesto mi nacimiento como un lugar sincero,
donde el corazón habla, donde el corazón se entrega,
así es, he nacido en el sentimiento de un destino,
ahí vivo, ahí existo, ahí nací por vez primera.
Alan Ponce